¿HAY VIDA DESPUES DE LA ARQUITECTURA?
Los arquitectos somos como una especie de hormiguitas que no pueden dejar de trabajar. Lo cual seguramente no es lo más sensato ni lo más sano, pero no deja de ser una realidad que la cantidad de horas que se invierte para la actividad que se está desarrollando es en la mayoría de los casos excesiva. No es cuestión de tener muchos o pocos encargos, ya que tenemos la especial habilidad de buscar siempre algo más que poder hacer. Sobre esta cuestión va la entrada de hoy.
El Premio Nobel Richard Feynman, era famoso tanto por ser un excelente físico por saber dedicar a su trabajo el tiempo justo, ni más ni menos. Creía que cuantas más actividades ajenas a él realizara y más excitantes y emocionantes fueran éstas, mejor desempeñaría después su labor de investigación. Con el tiempo se convirtió en un excelente pintor y percusionista. El conjunto de las actividades que realizaba provocaba la sinergia entre ellas. Así se convertía en un profesional cada vez más competente, crecía como persona y se hacía más diestro en los distintos campos donde se adentraba.
Sin embargo, la profesión de arquitecto tiene una especie de ensimismamiento, que nos hace meternos de lleno en lo que en ese momento tengamos entre manos y que en muchas ocasiones nos hace olvidarnos del mundo. Esta actitud viene heredada desde la carrera, donde el número de trabajos y horas que se deben invertir para que no se alargue esta etapa más de lo necesario, no se pueden comparar con casi ninguna otra carrera. Lo normal es que mientras los amigos del estudiante de arquitectura se van de fiesta o de excusión, los esforzados futuros arquitectos seguirán al pie del cañón, haciendo caso omiso de los planes que se generan a su alrededor. Y claro está, tanto trabajito, tanta endogamia… hará que al final un número elevadísimo de las parejas se produzcan entre los propios compañeros de clase. De hecho sería interesante saber este dato para constatarlo, sin ir más lejos nosotros mismos también nos conocimos estudiando en la universidad, y más de uno de nuestros amigos son pareja de arquitectos y no hace tantos años compañeros de clase.
Carlos Puente suele explicar en sus conferencias a estudiantes de arquitectura, que la clave para poder plantear una arquitectura digna es tener mucho tiempo libre. Insiste en que el arquitecto necesita pasar muchas horas con sus amigos, conocidos y familiares para poder conocer el mundo que le estaba tocando vivir. Él piensa que no es posible hacer arquitectura sino se entiende cómo vive la gente, y cómo los usuarios disfrutan de los espacios y edificios que los arquitectos proyectan.
Así que si Carlos Puente está en lo cierto, debería ser muy importante que desde que el alumno entra en la carrera tenga tiempo de ir a exposiciones, ir al cine, hacer teatro, practicar su deporte favorito, en fin, que destine el tiempo justo a la arquitectura, ni más ni menos, exactamente igual que lo que hacía Feynman.
Conviene no olvidarnos que los arquitectos siempre tenemos la extraña habilidad de liarnos con cualquier cosa, con tal de no tener ese tiempo libre que tanto nos merecemos. Si no hay muchos encargos, no se preocupen que el arquitecto será capaz de seguir invirtiendo el mismo número de horas aunque haya la mitad de trabajo, continuaremos acostándonos con ese “encuentro” sin resolver en la cabeza y siempre habrá un plano más para hacer o se podrá afinar más el presupuesto.
Quizás seamos los especialistas en ilusiones no realizadas. ¿Cuántos de nosotros pagamos rigurosamente la cuota del gimnasio, y pasan los meses sin pisarlo? ¿Cuántas veces os habéis apuntado a clases de ingles, (para de una vez por todas coger un nivel decente) y solo conocéis al profesor de verlo el primer mes de clase?, y ¿Qué nos contáis de esos cursos de fotografía que siempre tenéis echado el ojo y que nunca habéis podido hacer?
Y así pudiéramos seguir hasta el infinito y de hecho esperamos que nos contéis cuáles son esos deseos que algún día encontrareis tiempo de satisfacer!!
la imagen de la portada se publicó originalmente en la siguiente web
http://www.prtc.net/~josebc/poesia2008.html
9 COMENTARIOS
StepienyBarno
08/12/2009Contestando a Paco nos parece que entendemos por buena arquitectura o por lo menos la arquitectura que nos interesa, un tipo de arquitectura o forma de proceder arquitectónico prácticamente igual. Me parece que tenemos una visión de la jugada muy similar y el único problema es que a lo mismo unos le llamamos de una forma y otros de otra!
Respecto a lo que comentan sietequince, no podemos estar más de acuerdo. Como bien decís cuando estas metido en la batalla no ves casi nada de lo importante, solo cuando coges distancia puedes planear las buenas estrategias de lucha. Aunque solo fuera por esto, nos deberíamos tomas la vida un poco más relajadamente. O por lo menos intentarlo!
sietequince
04/12/2009Me encanta este post, desde 7_15 es lo que buscamos, de hecho uno de los objetivos de 7_15 es llamarse 8_15 o mejor aún 8_14 jejeje, aunque la arquitectura nos apasiona son muchas otras cosas las que también nos gustan, en especial la montaña y los deportes que en ella se practican, superabsorbentes y que exigen gran dedicación, así que Sr. Feynman ¡ChapeaU! menos currar, más disfrutar y más rendir, totalmente de acuerdo con que creatividad y la generación de buenas ideas se consiguen en los ratos libres, alguien ocupado y con mucho trabajo no tiene tiempo para las ideas innovadoras…
Un saludo y enhorabuena por esa nueva aventura!
SieteQuince
paco
03/12/2009Chicos, no creemos en la arquitectura con mayúsculas ni en el sabio juego de volúmenes bajo la luz.
Siento que seamos tan poco apasionados de la arquitectura.
Sí creemos, y nos encanta, en la arquitectura seria, responsable, que soluciona problemas a la gente y en la que la gente vive mejor, y que encima incorpora un componente de belleza (subjetiva, sí) por encima de la utilitas. Y a veces nos toca, y mucho, pero siempre menos que, creo, la música o la literatura. Así es la vida. Aún así, nos encanta la arquitectura, con minúsculas, siempre, y nunca con muchos ceros en el presupuesto.
StepienyBarno
02/12/2009Muy buenos estos propósitos para el próximo año!
Tendremos que empezar a pensar los nuestros, pero desde luego que reducir gastos y necesidades (que muchas veces nos inventamos) no es una mala idea. Y sobre todo lo que mas nos gusta es que podáis tener mucho, muchísimo tiempo, para esa niña que está a punto de venir al mundo!
Lo del doctorado seguro que lo conseguís e incluso nos aventuramos a afirmar que conseguiréis meteros de lleno en la tesina, con un tema que dará mucho juego, eso seguro.
Y sobre lo de la arquitectura con mayúsculas es relativo. Todo depende lo que se entienda por arquitectura con mayúsculas.
Una rehabilitación bien hecha, de manera seria, sin mucho bombo, pero con un buen cliente, que aunque no tenga mucha pasta si tiene mucho tiempo y dedicación, seguro que estamos de acuerdo en que esto sí que es arquitectura con mayúsculas, ¿a que si?
paco
01/12/2009Yo consigo muchas más cosas fuera de la arquitectura que dentro, así que discrepo de Feynman, aunque creo que tiene toda la razón.
Es mucho más fácil ir al gimnasio, a inglés, o comer fruta y dejar de fumar, que dedicarle todas las horas del día a la arquitectura, es decir, papeles chorra, normativas absurdas, concursos sin actas en los que pierdes el tiempo, el dinero y la ilusión, etc.
Será por eso que no prosperamos en la arquitectura pero sí, un poquito, en la vida.
Ejemplo, el año que viene sólo quiero hacer, fundamentalmente, tres cosas:
1. Como voy a tener una hija, estar con ella, para ello, voy a trabajar menos, como no ganaré más, sino lo contrario, gastaré menos.
2. Ir a todas las clases de doctorado -siempre- y hacer buenos trabajos de investigación en todas ellas.
3. Aprender francés.
A la arquitectura, con mayúsculas, que le den x c.
Conclusión:
Sólo triunfan los esclavos de la arquitectura, los superdotados o los que medran, o una mezcla de ambos. El triunfo sin renuncias sólo es posible, fuera del ámbito anterior, en excepciones poco abundantes, quizá Carlos Puente es una. Hay mucho más, hablo estadística o porcentualmente.
StepienyBarno
01/12/2009La verdad es que está bien que no seamos los únicos que vemos el tema así!! El tema se las trae y es más terrible de lo que parece en un principio. La semana que viene le atacaremos al tema desde otro prisma, pero creemos que llegaremos a conclusiones parecidas!
Semisotano
30/11/2009El gimnasio, el inglés,… todo lo demás… pero quien os ha autorizado a vosotros a ir contando mi vida por ahí… Si queréis leer otro ejemplo más de arquitectos acudiendo al llamamiento del trabajo altruista con final indeterminado, os invitamos al ultimo post en http://www.rgrm.es/semisotano/
en cualquier casi, y sin que sirva de precedente, es en tono optimista…
Marina
30/11/2009Es justo asi 🙂
JMER73
30/11/2009Jajaja. Me libro del gimnasio y del ingles, pero los libros se acumulan y las horas libres disminuyen.
Y no podria estar mas de acuerdo con Carlos Puente.