LA CAJA MAGICA DE DOMINIQUE PERRAULT
Como bien sabéis este fin de semana se ha inaugurado la caja mágica de Dominique Perrault. Una equipación deportiva clave en la candidatura olímpica de Madrid, y que aloja el Centro Olímpico de Tenis.
En la edición de ayer de la revista digital soitu (1), Diego Fullaondo nos dejaba un interesante artículo comentando este edificio.
En el comienzo del artículo Diego explica cómo el proyecto consiste en encajar el complejo programa en una sencilla forma geométrica. Operación que Dominique Perrault resuelve con éxito, apoyandose en una construcción casi perfecta, donde todo esta controlado al milímetro. La escala, el contexto y el presupuesto quedan bien resueltos desde el proyecto y se da un papel protagonista a la sucesión de espacios que realizan la transición desde la escala urbana hasta el interior del edificio.
El propio autor explicaba en la entrevista publicada en el diario el País (2), que en su caja el concepto fundamental es la flexibilidad, con la particularidad que en realidad nada se transforma, sino que se trata de ir eligiendo según necesidad de uso.
Más adelante, se incide en el término de «mágica», y de cómo es un edificio pensado para que la luz termine de construir la propia arquitectura, haciendo una bonita comparación de cómo la magia de esta caja se podría asimilar a la del mago Juan Tamariz.
Según Perrault su edificio «Es una caja de luces y la luz puede venir del exterior y penetra la caja a través de grandes cortinas metálicas, pero también puede venir de la apertura de las cubiertas. Es una luz también interior. El movimiento de estas cubiertas amplía el efecto luminoso de este edificio. La magia está ligada a la sorpresa…». (3)
Para terminar recordar que para Domique Perrault ganar el concurso fue una gran sorpresa. La razón de este asombro se debía a que su propuesta apostaba por un edificio con poca presencia, que no se rendía a los pies del espectáculo mediático tan presente en el resto de proyectos ganadores de concurso de esta escala.
Quedamos a la espera de ir a visitarlo y comprobar que los arquitectos estrella no se han olvidado de lo que es la arquitectura con mayúsculas.
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